Hace apenas siete minutos, internet estalló con la noticia de que Taylor Swift, la sensación mundial del pop, había lanzado un ataque mordaz contra Elon Musk, el multimillonario CEO de Tesla. Según fuentes cercanas a la historia, Swift supuestamente le dijo a Musk: “¡Deja Tesla ya, arrogante, inútil y canalla!”, durante una acalorada discusión que nadie previó. El explosivo comentario, supuestamente realizado en una gala benéfica de alto perfil en Los Ángeles anoche, 20 de marzo de 2025, ha causado conmoción en redes sociales, con fans y críticos luchando por elegir bando. Pero lo que realmente está acaparando la atención es la inesperada reacción de Elon Musk, que ha generado revuelo y convertido el asunto en la disputa del año.

El supuesto enfrentamiento ocurrió en el evento anual “Estrellas por una Causa”, al que asistieron Swift, de 35 años, y Musk, de 53, para apoyar iniciativas climáticas, algo irónico, dada la misión ecológica de Tesla. Los testigos afirman que la tensión comenzó cuando Musk, conocido por su descaro, hizo un comentario sarcástico sobre la huella de carbono de Swift, señalando su frecuente uso de jet privado. “Quizás si te importara el planeta tanto como la venta de entradas, todos estaríamos mejor”, bromeó Musk durante una mesa redonda, sonriendo con sorna mientras el público ahogaba la exclamación. Swift, que nunca se acobarda, contraatacó con una respuesta venenosa que dejó atónitos a los presentes. “¡Deja Tesla ya, arrogante, inútil y canalla!”, gritó supuestamente, con la voz entrecortada por los murmullos. “No puedes sermonear a nadie mientras juegas a ser Dios con tus pequeños juguetes”.

En cuestión de minutos, los clips de la confrontación, capturados por los teléfonos de los asistentes, inundaron plataformas como X y TikTok, acumulando millones de vistas. Swifties, la ferozmente leal base de fans de Taylor, la aclamaron como una reina por enfrentarse a Musk, con hashtags como #TaylorVsElon y #QuitTesla que fueron tendencia mundial. “Se lo comió y no dejó migajas”, publicó un fan, mientras que otro escribió: “¡El ego de Elon acaba de recibir un baño de realidad del martillo de Swift!”. Mientras tanto, los partidarios de Musk acusaron a Swift de hipocresía, desenterrando estadísticas sobre las emisiones de su avión para contrarrestar su ataque. “Tiene mucha cara al llamarlo inútil cuando está contaminando los cielos”, tuiteó un fan de Musk, lo que desató una feroz guerra en línea.

Pero el verdadero giro llegó cuando Musk respondió, y no fue lo que nadie esperaba. En lugar de su habitual estilo combativo, el magnate de Tesla se dirigió a X hace apenas una hora con una publicación críptica pero curiosamente reflexiva: “Las palabras duelen, pero los espejos son más difíciles de encontrar. Yo seguiré construyendo; ella puede seguir cantando. Comercio justo”. El mensaje, que ya ha recibido más de 500.000 “me gusta”, ha dejado a la gente perpleja. ¿Será un raro momento de humildad del famoso multimillonario, famoso por su seguridad en sí mismo? ¿O una sutil indirecta a la carrera de Swift? Los analistas están diseccionando cada palabra, y algunos sugieren que Musk podría estar realmente desconcertado por la crítica pública de la estrella del pop.



La historia de fondo echa leña al fuego. Swift y Musk nunca han sido cercanos, pero sus caminos se han cruzado antes. En 2023, Musk elogió la perspicacia empresarial de Swift durante su gira Eras Tour, que batió récords, tuiteando: “Es una fuerza, el capitalismo en su máxima expresión”. Swift no respondió entonces, pero fuentes cercanas afirman que desde hace tiempo le molesta la personalidad imponente de Musk y su tendencia a dominar todas las conversaciones. “A Taylor no le gusta la gente que se cree superior a los demás”, reveló una fuente cercana. “El comentario de Elon sobre sus jets fue la gota que colmó el vaso; llevaba un tiempo conteniéndose”. Mientras tanto, el equipo de Musk afirma que solo bromeaba y que no esperaba que Swift “exagerara”.

Las consecuencias son enormes. Las acciones de Tesla cayeron un 2% en las operaciones posteriores al cierre, mientras los inversores especulaban si el arrebato de Swift podría minar la credibilidad de Musk o indicar un mayor malestar en la compañía. Algunos analistas de Wall Street lo descartaron como ruido, pero otros advirtieron que la percepción pública importa, especialmente con la reputación polarizante de Musk. “Si Taylor Swift logra sacarlo de quicio, ¿quién será el siguiente?”, reflexionó un operador en la CNBC. Por otro lado, los fans de Swift ya están remezclando sus éxitos con letras anti-Musk, con frases como “Quítatelo, Elon, estás acabado” circulando en línea.



Sin embargo, lo que impulsa la fascinación es la reacción de Musk. Conocido por sus réplicas, como cuando le dijo a una crítica que “llorara más” el año pasado, esta respuesta más suave ha desconcertado a todos. “Yo seguiré construyendo; ella puede seguir cantando” suena casi filosófico, un cambio con respecto a su bravuconería habitual. Algunos lo ven como una maniobra calculada para calmar la tensión, manteniendo su enfoque en los próximos lanzamientos de productos de Tesla, como el Cybertruck 2.0. Otros creen que las palabras de Swift tocaron la fibra sensible, exponiendo una vulnerabilidad en el hombre que ha pasado décadas forjando una imagen invencible. “Comercio justo” podría ser Musk admitiendo que Swift tiene su camino y él el suyo, o una indirecta astuta de que sigue siendo el jugador más importante.

Internet está dividido. Los partidarios de Swift la consideran una heroína por denunciar la arrogancia de Musk, mientras que sus defensores argumentan que es una celebridad consentida que critica duramente a un visionario. Los memes abundan: Swift como un dragón que despotrica del logo de Tesla de Musk, Musk como un científico loco que se ríe de su ataque. Incluso las celebridades opinan: Billie Eilish publicó un críptico “¡Uy!” en Instagram, mientras que Dwayne “The Rock” Johnson tuiteó: “Palomitas listas para esto”. El momento de la disputa, justo cuando Swift se prepara para el rumoreado lanzamiento de un álbum y Musk enfrenta el escrutinio por los retrasos de la IA de Tesla, solo aumenta el drama.

Hasta el momento, Swift no ha hecho más comentarios, dejando que su arrebato hable por sí solo. Musk, mientras tanto, parece contento de dejar que su publicación sobre la expareja se enfríe, aunque fuentes cercanas insinúan que está furioso en privado. Ya sea que esto se calme o se convierta en una guerra abierta, una cosa está clara: el comentario de Taylor Swift de “imbécil arrogante, inútil y ruin” ha desatado una polémica cultural, y la respuesta de Elon Musk —tranquila, críptica o calculada— solo la ha avivado. El mundo está observando, y el próximo paso podría ser de cualquiera.